La inflación modera levemente su ritmo de subida en junio

En junio, la inflación ha mostrado una ligera desaceleración en su ritmo de subida. Según los datos provisionales adelantados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) este viernes, el Índice de Precios de Consumo (IPC) registró una variación interanual del 3,4% respecto a junio de 2023. Esto supone una reducción de dos décimas en comparación con el 3,6% de mayo. El INE atribuye esta moderación principalmente a la caída en los precios de los carburantes y, en menor medida, a un incremento más suave en los precios de los alimentos en comparación con el año anterior.

Inflación y precios de consumo

Si se confirma la lectura preliminar del INE, la inflación rompería en junio con la tendencia alcista observada en los últimos tres meses, aunque seguiría situándose por encima del 3% por cuarto mes consecutivo. En febrero, la tasa era del 2,8%, el nivel más bajo desde el verano del año pasado. A partir de entonces, la inflación fue subiendo gradualmente hasta alcanzar el 3,6% en mayo, el pico más alto desde abril de 2023.

Ahora, con una desaceleración de dos décimas, los precios no han bajado en comparación con hace un año, sino que han aumentado a un ritmo más lento. Solo en el último mes, los precios subieron un 0,3% respecto a mayo.

Impacto de los carburantes y los alimentos

El INE señala que la desaceleración del IPC se debe principalmente al abaratamiento de los carburantes, en contraste con lo ocurrido en junio del año pasado. Según el Boletín Petrolero de la Unión Europea, los precios del diésel y la gasolina han caído de forma continuada en los últimos dos meses, aunque esta tendencia se interrumpió la última semana justo antes de la Operación Salida del verano. A pesar de esto, el litro de gasóleo sigue por debajo de 1,5 euros y la gasolina súper 95 apenas supera los 1,6 euros por litro.

Los alimentos también han jugado un papel en la moderación de la inflación. Aunque su impacto ha sido menor, los precios de estos productos básicos han subido menos en junio de este año en comparación con el mismo mes de 2023. Para conocer el detalle de su evolución en junio, habrá que esperar hasta mediados de julio, cuando el INE publique los datos definitivos y el desglose por categorías. En mayo, el IPC de los alimentos se moderó al 4,4%, aunque productos básicos como el aceite y la fruta aumentaron un 62,8% y un 12,1% respectivamente en el último año.

Para mitigar el impacto de la inflación en los hogares, el Gobierno decidió prorrogar la rebaja del IVA en ciertos alimentos. Además, se ha reducido el tipo del IVA del aceite de oliva al 0% durante tres meses. A partir del 1 de octubre, el gravamen subirá al 2%, aplicándose también a alimentos básicos como pan, harina, leche, quesos, huevos, frutas y verduras. Asimismo, el Ejecutivo ha extendido hasta junio de 2025 los descuentos al bono social y ha prohibido los cortes de suministro hasta fin de año.

Sectores con aumentos de precios

A diferencia de los carburantes y los alimentos, los precios de productos relacionados con el ocio y la cultura han subido más que en junio del año pasado. Esto incluye billetes de avión y paquetes turísticos. Los datos detallados de junio aún no están disponibles, pero los artículos y servicios relacionados con el turismo y la restauración han estado encareciéndose con la llegada del verano. Por ejemplo, dormir en un hotel o comer en un restaurante es ahora un 37% y un 20% más caro respectivamente que en 2019.

El hecho de que los carburantes hayan sido los principales responsables de la desaceleración de los precios también explica el comportamiento de la inflación subyacente. Esta medida, que excluye del cálculo el precio de la energía y de los alimentos no elaborados por su alta volatilidad, se mantuvo estable en junio. Tras interrumpir en mayo su descenso de diez meses consecutivos, la inflación subyacente se ha estabilizado en el 3%. A pesar de todo, sigue siendo el segundo dato más bajo desde principios de 2022, solo superado por la tasa interanual del 2,9% registrada en abril. Este indicador da una idea de hasta qué punto la subida de los precios se ha trasladado al conjunto de la economía. Por tercer mes consecutivo, se mantiene por debajo del índice general.

Contexto y perspectivas

La moderación de la inflación en junio es una señal positiva, aunque el contexto económico sigue siendo complejo. Los precios de los carburantes y los alimentos continúan siendo factores clave en la evolución del IPC. Además, las medidas gubernamentales, como la rebaja del IVA y las ayudas sociales, buscan aliviar la carga sobre los hogares, pero también reflejan la persistente presión inflacionaria en ciertos sectores.

A medida que avancemos en el año, será crucial observar cómo se desarrollan estas tendencias. La evolución de los precios de la energía y los alimentos, junto con las políticas económicas y las condiciones del mercado global, influirán significativamente en la inflación. Mantenerse informado y adaptar las estrategias financieras personales será esencial para navegar en este entorno cambiante.

En conclusión, aunque la inflación ha mostrado signos de desaceleración en junio, el escenario sigue siendo dinámico y lleno de desafíos. La caída en los precios de los carburantes ha sido un factor clave, mientras que los alimentos y otros sectores presentan una evolución mixta. Las medidas del Gobierno y las fluctuaciones del mercado seguirán siendo determinantes en el comportamiento de los precios en los próximos meses.

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