El precio de celebrar una boda

Aunque cada vez son más los que eligen la temporada de otoño-invierno para celebrar su boda, los meses de primavera y verano siguen siendo los más demandados por los novios. Lo más habitual es que familia y amigos empiecen estos meses con la temida temporada ‘BBC’ (bodas, bautizos y comuniones). No obstante, la celebración que requiere un desembolso económico mayor es la boda (tanto para los protagonistas como para sus invitados).

El buen tiempo y la posibilidad de celebrar las bodas al aire libre son los dos motivos por los que esto es así. Iglesias, restaurantes y fincas llenan sus agendas con más de un año de antelación y si se quiere celebrar una boda en menos de un año, es posible que los novios tengan que recorrer varios lugares hasta encontrar una fecha que les cuadre.

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La señal que den los novios en el establecimiento será el pistoletazo de salida para un sinfín de gastos que irán llegando hasta el día de la boda y , para algunos, incluso más allá. Vestido, zapatos, flores, fotógrafo, vídeo, regalos para invitados, decoración de todo tipo, peluquería, autobuses, coche de los novios… Sin embargo, aunque parezca una lista interminable, ahorrar en las bodas es posible siempre y cuando se comparen precios y se tenga muy claro el límite de gasto.

¿Cuántos matrimonios se han celebrado en España en 2016?

Según los últimos datos del INE, un total de 172.243 parejas contrajeron matrimonio en España en 2016. Este datos es un 2,0% más que en el año anterior, una tendencia creciente que comenzó en el año 2013 y que continuará para 2017. La tasa bruta de nupcialidad aumentó una décima, hasta 3,7 matrimonios por mil habitantes. Sin embargo, esta cifra aún está lejos de las 207.766 bodas que se celebraron en el año 2006. Igual que ocurre con el número de contrayentes, la edad media de los novios también ha ido en aumento y, en 2016, se situaba en 37,5 años para los hombres y 34,7 para las mujeres.

Este aumento también se ha reflejado en la facturación de las empresas del sector que, según un estudio de ESADE y Bodas.net, ha crecido un 10% en 1 de cada 3 empresas. Concretamente, España es líder de ventas y en 2016 facturó 1.246 millones de euros, además de producir 755.000 vestidos de novia para todo el mundo, según un estudio elaborado por el profesor Nueno, del IESE. El sector nupcial , y más concretamente el de moda, ha sabido adaptarse perfectamente a los últimos tiempos y, tras detectar una caída del consumo en el sector por la llegada de la crisis, decidió internacionalizar sus productos y servicios, compensando la caída y mejorando, en algunos casos, respecto a años anteriores.

El precio de una boda

Durante los últimos años, el gasto que supone la celebración de una boda ha ido en aumento. Uno de los principales motivos, es la edad de casarse. Los futuros marido y mujer suelen tener unos 30 años y , la mayoría, han dado prioridad a sus carreras, han buscado una estabilidad, un trabajo y, lo que es más importante, han ahorrado una buena cantidad de dinero. La edad y un mayor poder adquisitivo hace que estas parejas busquen los mejores servicios y se gastan (porque pueden) más dinero.

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Según el estudio de ESADE, el precio medio de una boda en España está alrededor de los 18.000-20.000 euros y los novios no varían su presupuesto inicial en más/menos un 10%. Por supuesto, este precio varía dependiendo de la comunidad autónoma. Por ejemplo, la media de gasto de una boda de unos 100 invitados en Madrid llega a los 21.000 euros y en Canarias ronda los 12.000 euros, según FUCI.

Lógicamente, el mayor porcentaje de este presupuesto destina al lugar de celebración y al catering, un 65% del total, según el estudio de ZIWO, Zankyou International Wedding Observatory. A este porcentaje le sigue el que se destina al vestido de novia (21%) y la fotografía (10%).

Los millennials, futuros novios

Ahora les llega el turno de celebrar su boda a todos aquellos que nacieron a partir de los años 80, la conocida como generación millennial. Son expertos en nuevas tecnologías y todos ellos utilizan varios dispositivos al día. Tablet, smartphone, ordenador… Cualquier momento es bueno para comparar precios de vestidos, zapatos, peluquería y fotografía antes de dar el ‘sí, quiero’.

Por eso, las empresas se han ido adaptando a sus necesidades y también han lanzado servicios y productos ‘low-cost’ y de alquiler de cualquier cosa (hasta de madrinas). Los organizadores de bodas son, a menudo, una de las opciones elegidas por los novios. Tanto para los que no tienen tiempo de organizar, como para los que no saben por dónde empezar, las empresas de organización de bodas son la mejor solución. Además, suelen ofrecer varios proveedores para adaptarse a cada presupuesto. Aunque muchos puedan pensar lo contrario, un wedding planner puede ser la solución para una boda más asequible. Todas las parejas buscan por internet antes de decantarse por una compra o reserva.

Ahorrar en una boda

Según el estudio de ESADE, los novios de ahora no quieren endeudarse para su boda. El pago de la boda se hace con dinero ahorrado, los regalos de los invitados y ayudas de los padres, por ese orden. Sin embargo, con el paso de los años los padres no son tan importantes en cuanto a lo económico se refiere. Los futuros novios tienen muy claro todo lo que quieren y gracias a interminables búsquedas en internet encuentran todo lo que habían pensado para el gran día.

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Ahorrar en una boda también es posible, y los novios lo saben. Lo más habitual para ahorrar es el alquiler y el DIY (do it yourself , es decir, hazlo tú mismo). A menudo, los trajes de novio, padrino y testigos son de alquiler, que pueden variar de precio en función de las veces que se haya usado el traje. El alquiler de un traje a estrenar está en torno a los 250-300 euros. Una cantidad que subirá a los 500 euros de gasto al incluir zapatos,gemelos y posibles extras. Sin embargo, es probable que la gente joven tenga que ser testigo varias veces durante sus próximos años. Ya se sabe que cuando un amigo se casa, el resto va detrás. En estos casos, es mejor plantearse la posibilidad de comprar un chaqué cuyo precio podría equivaler a 2-3 alquileres.

Aunque las empresas de alquiler de vestidos para bodas son muy comunes entre invitadas, el vestido de la novia no suele alquilarse ni comprarse de segunda mano, una técnica muy extendida en países como EEUU. En España, se puede encontrar un vestido de novia por unos 500 euros, aunque la media está en torno a los 1.500-2.000 euros.

Las invitaciones online son otra forma de ahorrar algo de dinero. Sin embargo, las invitaciones físicas siguen siendo las elegidas y , además, cada vez son más personalizadas. Las invitaciones suelen ir acorde con la decoración del día de la boda y , a menudo, se utiliza el mismo diseño para invitaciones, minutas, carteles, etc.

Otra forma de ahorrar es cambiar la fecha de la boda. Las bodas de primavera y verano son más caras por la demanda, sin embargo, y a pesar del frío, las bodas en otoño-invierno son cada vez mas comunes (e igual o más bonitas). Al ser una época en la que hay poca demanda, se pueden encontrar precios mucho más económicos. En primavera y verano, casarse un viernes por la tarde o cualquier día por la mañana es también más barato que hacerlo por la tarde-noche.

Por último, las bodas multitudinarias son cada vez menos comunes. Los compromisos, tanto de novios como de padres, han pasado a un segundo plano y las bodas más habituales cuentan con 150-200 invitados.

El precio de ser invitado en una boda

Las bodas son siempre motivo de alegría. Sin embargo, el desembolso económico no siempre viene bien a todos. Además del regalo a los novios, los invitados que tengan que desplazarse tendrán que hacer frente a unos 200 euros de gasto medio, sin contar con el vestido y el traje. Como no podía ser de otra manera, las bodas más caras son en Madrid, Cataluña y Valencia, y las más baratas en Asturias, Extremadura y Canarias.

El regalo a los novios suele depender del lugar donde es la celebración, de la relación con los novios y del desplazamiento que han podido hacer los invitados. El regalo suele estar en torno a los 120-210 euros. Según el estudio de FUCI, en una boda de 100 invitados un regalo de 165 euros por persona sería suficiente para cubrir los gastos de la boda. Si bien, es cierto que no todos los invitados llegan a esa cantidad y que otros mucho más cercanos la superan con creces.

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